Para un faraón no había mayor honor después de muerto que morar eternamente en una grande y protegida pirámide. Para Cleofás El Grande, cuyo gigantesco santuario ya estaba listo, el placer de yacer en su tumba para siempre debía ser compartido con la que fue su única y más apreciada mascota: el ave eterna. Y de hecho así se intentó hacer, solamente que había un pequeño problema por resolver: el ave no moriría nunca. Así que los empleados del faraón se pusieron manos a la obra en la creación una pócima que la haga dormir eternamente. Lastimosamente su bebida parece no haber surtido efecto, pues el ave ha despertado luego de 1000 años de encierro en un sarcófago. Ahora su misión será salir de la pirámide sin ser lastimada, pues a cada paso las mortales trampas se ciernen con sigilo contra cualquier alma desprevenida.
Cómo jugar: Utiliza los cursores (flechas de dirección) para llevar al ave de un lugar a otro. Mantén presionada la flecha hacia arriba para volar, mientras presionas la flecha derecha o izquierda, según la dirección deseada.
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